El Muñeco de Nieve

¡Hola! 

Empezamos el año con un post que llega a deshora, pero como ya os dije en la entrada de mis favoritos de 2017, no me voy a estresar por ello. Por cierto, antes de empezar con la entrada, os recomiendo  que vayáis a mi lista de favoritos del año pasado por si hay algún libro que aun no habéis leído, poder leerlo. 

Otra de las cosas que os comenté en ese post es que iba a eliminar el libro del mes, pero que en cuanto terminase de leer El Muñeco de Nieve de Jo Nesbo os traería la reseña y, aquí está. Por cierto, ya que hablo de anuncios, Noe y yo hemos decidido reducir el ritmo de nuestro club de lectura a un libro cada dos meses porque las dos estamos super ocupadas

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El caso, es que hoy os traigo la reseña del que elegisteis para que fuese el libro del mes en diciembre. Un libro que como ya os comenté en su día tenía muchas ganas de leer, sobre todo desde que había salido la película que, protagoniza Michael Fassbender. El caso es que a pesar de tener muchas ganas de leer el libro he tardado como un mes en leerlo (no terminaba ningún libro desde el puente de diciembre). 

El Muñeco de Nieve es un libro que es parte de una serie que sigue al detective Harry Hole. No sé el resto de libros, pero éste al menos lo podéis leer sin haber leído los anteriores. Para mi era el primer libro que leía del autor y de la saga y, a pesar de ello, no he tenido problemas para seguir la historia.

En este caso, seguimos a Harry mientras intenta desenmascarar a un asesino que deja tras de sus macabros crímenes muñecos de nieve. Es un caso que se remonta a unos cuantos años atrás pues hay otras victimas al rededor de Noruega. 

Lo primero que creo que debo decir sobre este libro es que me ha gustado mucho el personaje principal. Creo que Harry está muy bien construido y, tiene sus luces y sus sombras. No sé si esto es porque era la séptima vez que el autor se metía en la piel del personaje o por otro motivo; no obstante, intuyo que tendrá bastante que ver. No es lo mismo escribir sobre un personaje una vez que hacerlo veinte. 

Como iba diciendo me encanta Harry porque es un personaje con luces y sombras. Es evidente que quiere hacer lo correcto, pero que no utiliza los métodos más convencionales (o correctos para ello). Es interesante ver, como tiene problemas y, como esos problemas le afectan. Me gusta que sea un personaje torturado en todos los sentidos y, que el autor al contar la historia haya sido capaz de trasmitirlo. 

Por otra parte me ha gustado la estructura en la que la historia está contada. Los capítulos van casi a la par que los días que dura la investigación y, gracias a ello, entendemos mejor la manera metódica en la que trabaja la policía para resolver los casos. No sé si será verídico o no, porque no conozco a ningún policía y, menos a ningún policía noruego, pero a mí me ha parecido que todo tenía bastante sentido. 

El estilo del autor es bueno. No tiene florituras, sino que va directo al grano. Esto es algo que funciona muy bien, sobre todo cuando el autor intenta meternos en la cabeza del protagonista. Harry a pesar de ser un personaje enormemente complejo, es una persona a la que le gusta ir al grano, de modo que es una manera brillante de hacernos comprender mejor al personaje. 

Sin embargo, no es oro todo lo que reluce y, le he encontrado un par de fallos al libro, que en un thriller son fallos grandes. He encontrado la historia demasiado predecible. Desde el primer momento en el que el asesino apareció supe quien era y, la verdad es que con cada página que pasaba estaba más seguro de ello. El otro gran giro de la trama era también bastante predecible. No sé si yo me he dado cuenta porque he leído muchos libros de thriller o, porque realmente es una cosa tan obvia. En cualquiera de los casos, si habéis leído el libro decirme si los dos giros importantes de la trama os resultaron predecibles. 

En general, es una lectura que he disfrutado y, que sí que recomendaría a pesar de los fallos que he encontrado. Por ello le doy 3 estrellas. 

Por cierto, los que hayáis visto la peli, ¿me la recomendáis?

¡Nos vemos en el próximo post!